Los nuevos proyectos financiados por la Fundación amplían la injerencia de la multinacional en la enseñanza pública junto a la empresa argentina Agua Segura.
Víctor L. Bacchetta, en Sudestada 30/9/2020.
La última semana, la Fundación UPM anunció los proyectos ganadores del llamado público realizado este año. «Abrimos anualmente esta convocatoria con el objetivo de reunir propuestas de proyectos que presenten instituciones, organizaciones y público en general que den respuesta a retos educativos y de desarrollo comunitario en el interior del país”, declaró la presidenta de la Fundación, Magdalena Ibáñez.
“Nuestra Fundación trabaja hoy en más de 150 comunidades, la particularidad es que más del 80% son de menos de 500 habitantes», afirmó Ibáñez. Las acciones de la Fundación deberían ser un aporte desinteresado de UPM a la sociedad uruguaya, pero la multinacional finlandesa lo utiliza como un recurso publicitario para lograr el apoyo de la población a sus inversiones agroindustriales en el país.
«El acercamiento a nuestras comunidades de influencia y el trabajo con sus principales referentes nos ayudan a detectar sus principales necesidades y trabajar para apostar a su crecimiento», explicó la Fundación UPM. En 2019, la organización intervino en doce proyectos que llegaron a siete departamentos y más de 60 comunidades, con unos 2.200 participantes, de ellos 155 educadores, y 14 organizaciones asociadas.
Los proyectos van desde becas para cursar bachillerato, capacitación de profesores de enseñanza media para introducir la robótica, cursos de Sicología Positiva y de posgrado en Currículum y Evaluación para docentes de secundaria, hasta educación vial en las escuelas, cursos de perfeccionamiento y gestión para costureras y la confección de 3 mil tapabocas reutilizables para las policlínicas locales.
Este año, entre unas 70 propuestas, la Fundación eligió a “Comunidades Activas” y el “Programa de Liderazgo e Innovación Educativa”. El primero es implementado por la empresa argentina Agua Segura y consiste en mejorar el acceso a agua potable para escuelas y familias rurales. El segundo se propone aportar nuevas herramientas y capacitación para directores de centros educativos formales del interior.
Además, en las poblaciones impactadas directamente por la planta de celulosa en construcción, UPM tiene siete proyectos: mejora de infraestructura en dos escuelas, una cancha de césped sintético para un club y una huerta orgánica familiar y comunitaria en Paso de los Toros; biodigestores para la enseñanza y cursos de informática en Carlos Reyles y la construcción de una nueva plaza en Pueblo Centenario.
El proyecto Agua Segura
Definido como un proyecto de desarrollo comunitario, “Comunidades Activas” consiste en la instalación en escuelas rurales de filtros purificadores para garantizar la calidad del agua en las comunidades. Este proyecto irá acompañado de talleres del uso y manejo del agua potable, tanto para la comunidad educativa como para las familias por medio de la organización de jornadas de intercambio educativo.
Según lo informado por la Fundación, se construirá asimismo un sistema de captación y almacenamiento del agua de lluvia. Esto se propone realizar en conjunto con un equipo técnico especializado y la comunidad para que queden los conocimientos instalados. De esta manera, el proyecto se propone que las familias repliquen las soluciones aprendidas y maximicen el impacto alcanzado.
Este proyecto no es nuevo en el país, desde noviembre de 2018 lo realiza Coca-Cola Uruguay, también a través de su Fundación, en 37 escuelas de los departamentos de Tacuarembó y Rivera. En este caso, lo ejecuta la misma empresa argentina Agua Segura, en coordinación con el Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP) y la Fundación Indra, una ONG dedicada al desarrollo territorial rural y aguas.
Agua Segura se autodefine como una empresa social que combina «la habilidad de las empresas para hacer negocios, la pasión del sector social para impulsar causas con impacto y el poder de cambio del sector público». Presente en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Uruguay, el propósito de la empresa es «diseñar e implementar proyectos sociales y ambientales para la resolución de la crisis del agua».
«Llama mucho la atención que empresas como UPM estén financiando proyectos de potabilización de agua. Suena a la llamada Responsabilidad Social Empresarial, para obtener la «licencia social» que les permita crear la ilusión en la población de que contribuyen a su bienestar y por otro lado seguir contaminando las fuentes de agua», comentó Carmen Sosa, integrante de la Comisión Nacional en Defensa del Agua y la Vida.
Remitiéndose al Artículo 47 de la Constitución, modificado por el plebiscito de 2004, Sosa dijo que «el Estado tiene la obligación de dar agua potable y saneamiento y también tiene la obligación de crear ámbitos de participación en la gestión de las soluciones y proyectos a implementar. Es inaceptable que se asocie con los contaminadores como UPM y Coca-Cola para ofrecer falsas soluciones».
Globalización educativa
El Programa de Liderazgo e Innovación Educativa de UPM en Uruguay estará dirigido por la Fundación Varkey, organización filantrópica del empresario indio Sunny Varkey, presidente del Grupo que lleva su nombre, radicado en Dubai.
Varkey ha sido el creador de GEMS Education, el mayor gestor de escuelas privadas del mundo, desde jardín de infantes hasta el grado 12, con una red de más de 130 escuelas en más de 12 países.
GEMS (Sistemas Globales de Gestión de la Educación, en inglés) se propone formar «ciudadanos del mundo con visión de futuro con valores universales y cualidades de liderazgo». Pero según informa la Wikipedia las escuelas GEMS se adaptan a distintos mercados y niveles de ingresos, las escuelas más caras tienen terrenos y servicios más amplios, incluyendo campos de golf y tenis, y aulas más pequeñas.
El Grupo Varkey reúne a GEMS Education y otras actividades que incluyen servicios de salud y, en el pasado, la construcción. Su propietario fundó la empresa en 1979 en Dubai, pero ahora tiene oficinas en el Reino Unido, Estados Unidos e India.
La Fundación Varkey se dedica a diseñar e implementar programas de formación para directivos de escuelas y docentes a escala global. El programa Liderazgo e Innovación Educativa viene ejecutándose desde hace cuatro años en las provincias argentinas de Mendoza, Corrientes, Salta y Jujuy. Ha sido tomado como caso de estudio por la Universidad de Harvard y destacado por el Banco Mundial, la OEA y CAF.
Según la Fundación UPM, el programa brindará a directores y docentes de los centros de enseñanza nuevas herramientas y mayores capacidades de liderazgo en la gestión y el aprendizaje. El primero se centra en la organización, el desarrollo profesional y la comunidad, mientras que el segundo tratará temas clave en el contexto de las necesidades del Siglo XXI y los aportes de la investigación educativa.
«Las actividades de UPM en el sistema educativo y en las comunidades son acciones paternalistas … meras obras de caridad facilitadas por sus enormes ganancias gracias a los subsidios concedidos», expresaron recientemente integrantes del Movimiento por un Uruguay Sustentable (Movus) en una carta a la primera ministra de Finlandia, Sanna Marin.
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